Empecé mi experiencia en Orona trabajando dentro del equipo de ingeniería soporte preventa (EAV) ubicado en una de las dos plantas productivas que Orona tiene en el País Vasco, en el norte de España.
Tuve la oportunidad de conocer y vivir en el entorno de la sede corporativa en Hernani.

En este departamento nos encargamos de ofrecer soporte técnico a nivel mundial.

Trasladarme a otro país a vivir no es una decisión que tomase a la ligera. Desde el primer momento, el equipo me hizo sentir como en casa.
Emplearon su tiempo en hacerme sentir uno más de la familia Orona así como en formarme: desde los procesos de fabricación hasta las expediciones. 
Hicieron que me sintiese arropado en todo momento y eso es algo que les agradezco.

Creo que esta experiencia ha sido muy enriquecedora tanto a nivel profesional como personal.
Además de hacerme descubrir un sector interesante y apasionante como es el de elevación, me ha dado la oportunidad de conocer otra cultura.
He descubierto nuevas costumbres y me han hecho disfrutar muchísimo, ¡sobre todo el pintxo-pote!

Gracias al apoyo de toda la familia Orona he aprendido muchísimo de mi experiencia internacional incomparable.

Tras pasar dos años trabajando en Hernani, pedí que me trasladaran a Toulouse, para estar más cerca de casa. Aprecié mucho la flexibilidad que mostraron a la hora de organizar mi regreso a Francia. Trabajé como supervisor de obra durante 4 años y luego pasé 9 meses en la sucursal de Île-de-France. En octubre de 2023, para diversificar mi experiencia y mis competencias, Orona me ofreció un puesto de Jefe de Mantenimiento en la sucursal del Ródano, en Lyon, el cual acepté.